Pequeñas cosas pueden tener una gran importancia. Es mejor no dejar el grifo correr todo el tiempo mientras que nos cepillamos los dientes. Si tenemos un retrete que deja un flujo permanente de agua, esto puede representar varias decenas de litros de agua al día. El uso de los modernos sanitarios secos permite, sin olores, ahorros de agua aún más importantes (más de 10m3/años/persona) y da un compuesto para la mejora de nuestros residuos. Beber agua del grifo (no es posible en todos los países) en lugar de agua embotellada nos permite no malgastar a los residuos de envases. Lavar la ropa con productos biodegradables y con agua fría también es una más importante.