Rechazo

Insistió mucho, pero la evité siempre porque sabía que nuestro amor sería temporal. Yo podía encontrar el portal en cualquier momento.

DUDA EXISTENCIAL

No podía discernir si era a causa de la crisis económica o por su innata mala suerte. Tres títulos universitarios, dos masters y dominando cinco idiomas. Y sólo le ofrecían un trabajo temporal como almacenero. (Puede ser de un día o de tres meses, depende del mercado; cobrando la mitad del sueldo "en negro" y sin contrato ni seguros, claro. Es lo que hay, amigo. Si no le interesa hay muchos esperando.)
Decidió salir de dudas. Asaltaría un banco. Lo tenía todo muy bien planificado. Si lo pillaban, es que era un gafe sin remedio. Y si no...

(cien palabras justitas, para que no se queje Omar...)

Putrezuela

Atormenta la tormenta de mentiras, el temporal de insultos, la violencia del Estado, el vendaval de odio desatado desde 1.999.

DÍAS DE PASIÓN
Él predijo que ese amor era eterno, ella replicó que solo era temporal, ante la sorpresa de él, ella aclaró: solo cuando llueva.

¡Actualizada la palabra del taller de micros!
También pido disculpas por el retrazo.....

Un finde anormalmente agitado me ha distraído de mi obligación de dejar el palabro semanal. Perdonénme todos.

Os dejo una palabra de desgraciada actualidad en las costas españolas: en las del Norte por violencia de los elementos naturales, tempestades, huracanes, etc. en las del sur, por la violencia irracional de los elementos humanos, policías, ejército, etc. ejercida contra los inmigrantes indefensos.

TEMPORAL
(Del lat. temporālis).
1. adj. Perteneciente o relativo al tiempo.
2. adj. Que dura por algún tiempo.
3. adj. Secular, profano.
4. adj. Que pasa con el tiempo, que no es eterno.
5. m. tempestad (‖ tormenta grande).
6. m. Tiempo de lluvia persistente.
7. m. And. Trabajador rústico que solo trabaja por ciertos tiempos del año.
8. m. p. us. Buena o mala calidad o constitución del tiempo.
capear el ~.
1. loc. verb. coloq. Evitar mañosamente compromisos, trabajos o situaciones difíciles.
□ V.
baja temporal
conjunción temporal
poder temporal
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temporal.
(Del lat. temporālis, de tempŏra, sienes).
1. adj. Anat. Perteneciente o relativo a las sienes. Músculos temporales.
2. m. Anat. hueso temporal.
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El consejo

—«Siempre evita una provocación porque puede llevarte al fracaso», ese consejo de mi padre siempre guió mi vida; hasta aquella noche que Julia me solicitó fuego para el cigarro…
Manolo habló un rato más, hasta percatarse que su compañero de celda se había quedado dormido; entonces se volteó a la pared.

IMPOTENCIA
Gruesas lágrimas caían por las mejillas del camionero, mientras sentado al borde del camino, hablaba con la niña de nueve años, que se había cruzado delante de su camión, PROVOCÁNDOLE así la necesidad de detenerse.
Sentia piedras en el pecho, porque le había ofrecido su cuerpo, y al pedirle que no lo hiciera mas, que era una nena, que le daría dinero y hablaría con sus padres, le contestó:
Somos diecisiete hermanos, y cuando se termine la plata que vos me distes, tengo que volver a “trabajar”.
Y dándole las gracias, le echó los brazos al cuello, le dijo que no llorara mas y se alejó corriendo.

Presidente Payaso

Patricio Puertas peligrosamente poco predecible penosamente parece pelmazo, parsimoniosamente prepara papeles para parásitos postrados, potencia pergaminos, palimpsestos, pliegos, parafrasea posiciones políticas para pueblos postergados.
Platea, pule palabras pálidas petrificadas, propicia pícaramente posibles puntos punibles, prevé próximos peligros poco probables pero pretexta pasividad.
Prioriza posiciones políticas, posteriormente propone posibilidades para patrimonios públicos, pinta premeditadamente pasiones, pondera poder posicionarse permanentemente.
Provoca pensamientos positivos para pescar partidarios, propone participar pulcramente por propiedades, posesiones, pertenencias, piezas perdidas.
Patricio Puertas puede por prácticas políticas perversas, por puras patrañas posicionar
peligrosamente pies para presidente.

Nota: Ejercicio con P

Para abrir boca y animar a los compas:

TODO UN INSULTO.

Estaba acostumbrado a todo tipo de desprecios y humillaciones. Ni era agraciado físicamente, ni culto ni bien situado socialmente; en definitiva, era un casi marginado por sus conciudadanos. Por eso consideró una provocación inadmisible y fuera de tono que aquella bellísima mujer le dijese: “Eres el hombre de mi vida. Cásate conmigo.”