Mi deuda era grande pero la voy pagando y falta poco, menos mal que no es con un banco, porque los intereses me hubieran comido el seso. Faltaban los comentarios y aquí los tengo. Gracias por la paciencia.

El Hallazgo: Estela

En esta versión policiaca Estela nos deja abierta la puerta de la duda, la misma puerta que el librero ha cerrado y que nos puede conducir a develar el secreto que se esconde en la librería de la calle Corrientes. Con la misma intensidad que recorremos los senderos marcados por los anaqueles llenos de libros viejos, en busca de un incunable, recorremos con esta joven los pasillos de la librería en busca de pistas que nos conduzcan a la resolución de las incógnitas que el destino, o una mano oscura nos alcanza.

Los Exiliados: Rodrigo

Es una fotografía en blanco y negro, en donde han desaparecido los grises y nos muestra ese mundo de sufrimiento y dolor, al que somos empujados a conocer, ya sea por las noticias, o por algún amigo ligado a la experiencia de huir, dejar todo y salir a enfrentar los innumerables riesgos de exilarse en busca de una patria nueva.Un texto de gran actualidad que debe movernos a la solidaridad.

Las sombras: Rodrigo

Un cuento de corte fantástico con el que Rodrigo nos introduce a otra realidad, en donde no solo perdemos nuestra estructura física, sino que también perdemos la indiscutible noción de realidad para entrar con pasos temerosos al mundo de lo desconocido.

El paseo matinal: Rodrigo

El titulo nos ilusiona con un texto de esperanza, un recorrido por las calles o campos que bien puede recorrer el autor cada mañana para buscar pan recién horneado, y nos dibuje una linda fotografía del paisaje y lo intentó, pero es imposible resistirse a la realidad y nos hizo regresar de esa posibilidad luminosa para atender el llamado del vecino y contarnos que está jubilado, que además la economía se ha contraído, que el futuro es cada vez más incierto y más gris que el mismo cielo que lo ampara.
Ha sido un enorme descubrimiento quedarme como en la orilla de los dos planteamientos, sin saber que dirección tomar.

Recuperando sueños: Estela

Magistralmente planteado el problema de lka diferencia que existe entre los varones y las hembras y las oportunidades que le niegan a las hembras y en cambio le dan a los varones, la libertad para unos y e encierro para ellas, en medio de un ambiente campestre y de apariencia segura. Lo mejor es el final en donde la madre se involucra y acompaña los sueños y se hace cómplice de la libertad que debe ser para ambos. Debemos siempre recordar que la libertad debe ser para todos por igual y tu texto lo alienta de forma maravillosa.

Mantengo mi palabra de escribir los textos que me faltan. Llegué a marzo con un cambio y un exceso de palabras.

Alfajor. Corte. Litiga/o. Liebres. Paroxismo. Templo. Sostén.

El misterio de la Incógnita resuelta de antemano

A mi amigo Bernie y el misterio
de su encriptado código: 5422.
Con las disculpas
que el caso amerita.

Recibí el correo de manos del conserje, reconozco en el remitente a un gran amigo, un entrañable de puño y letra, que mantiene intactas anacrónicas costumbres: Certifica sus cartas, coloca alineadas las estampillas correspondientes y con su estilográfica dibuja en tinta negra, diminutas letras de imprenta, con ellas, alimenta líneas imaginarias.

Son inconfundibles los detalles menores que caracterizan su trazo, y seguramente, en la simbología de la ciencia grafológica, se pueden descubrir los intensos matices de la personalidad de mi amigo Bernie: Algo dirán los estudiosos de sus gordas consonantes, de sus estilizadas vocales y del impecable acento marcado con precisión gramatical, sobre su preciosa caligrafía.

Sus cartas son amenas, divertidas, tiene esa capacidad de entrelazar cuentos menudos, que en el texto, se convierten en personajes centrales. En sus relatos sorprende ese toque de humor y cinismo compartidos, que me falta.

Al recibir la carta perdí las buenas costumbres que me caracterizan, y en el paroxismo de una emoción desmedida, quise leerla de inmediato, intenté llegar apresuradamente a ese templo en que he convertido mi estudio y omití por completo el bastón, el incondicional apoyo de ese trozo vertical de madera, con empuñadura de plata, que no debo abandonar. Descuidé el sostén que me mantiene dignamente en pie.

En presencia del conserje, de su trato amable y considerado, de sus atenciones y consideraciones con mi persona y con mi edad, renegué de mi torpeza, maldije en buen castellano altisonante mi condición de lisiado, en esos breves instantes perdí por completo, literalmente, los estribos, litigo con sombras del pasado y se me escapan las liebres de la cordura.

Con dificultad pido disculpas, guardo el sobre sin doblarlo en el bolsillo interior de mi chaqueta, retomo la compostura y en silencio, abrumado con lo injusto de mis actos, espero con sobrada impaciencia y pena, que se abran las puertas del ascensor.

Llego descompuesto al departamento, me preceden los restos de la rabia que no termina de morirse en la puerta y me arropa la vergüenza. Camino directamente a la cocina, enciendo el hervidor, preparo un té amargo, me sirvo un alfajor de membrillo y camino al estudio ayudado con el bastón: Llevo en el bolsillo la carta de mi amigo y sobre un plato, la taza de té y el alfajor de membrillo.

Me siento en el sillón, bebo un sorbo del té, rescato la carta del bolsillo, tomo del escritorio un cortapapeles de marfil, hago un corte preciso en el sobre, extraigo la carta y leo:

Hola JJ. En tu texto “Un sueño imposible” pones una cita antes del relato. Una vez leí como se llaman esas citas en literatura. Tienen un nombre específico, pero no lo recuerdo ahora. ¿Tú lo sabes? Bernie.

¿Sabes?...acabo de encontrarlo, y hace meses que quería saberlo. Se denomina epígrafe. Perdón por la molestia, J.

Dejo la carta abierta sobre el escritorio.

Recuerdo vagamente el texto de referencia, pero conservo intacto en la memoria el detalle del mencionado epígrafe. Esta carta de mi amigo, en la que precisa una respuesta para una incógnita que él resuelve de inmediato, no me deja dudas. La pregunta que no se atreve a hacerme es otra.

¿Quién firma el epígrafe?

Creo conocerlo y puedo asegurar, que intentó descubrir, manoseando en su extensa biblioteca al autor escondido detrás de la firma, sospechó que era apócrifa, presumió una conjetura entre múltiples imprecisiones, vislumbró una respuesta, pero necesita confirmar la autoría del epígrafe y no puede interrogarme directamente, se le ocurre con esta carta abrir la puerta de nuestras viejas y controvertidas conversaciones.

No me queda otra alternativa, debo escribir a mi amigo Bernie, agradecer su carta y comentarle, entre otras muchas cosas: Que me tomé la licencia de firmar el epígrafe del texto “Un sueño imposible” con la inicial de mi segundo nombre y mi apellido materno.

EL PASEO MATINAL -Rodrigo

Tienes el maravilloso don, Miguel, de hacerme "vivir" desde tus textos, cada lugar, cada espacio, cada aroma, cada sonido, cada claroscuro, cada sentimiento . Me has hecho(como tantas otras veces) sentirme partícipe del paseo matinal. Yo también estaba ahí.

Magnífico texto!

LA INÚTIL Y ESTRICTA VIDA DE TEODORO ARREGUEVER. José Jesus Morales.

Un análisis profundo y descarnado de esas "obligaciones" que consideramos IMPRESCINDIBLES, impidiéndonos nosotros mismos gozar de la cuota que nos merecemos de felicidad, que también hay que saber construir.
TEodoro advierte que ha dejado "transcurrir" su vida, sin saber disfrutar de las mejores cosas que se nos brindan; y cuando lo advierte es demasiado tarde.
Un planteo sumamente interesante y enriquecedor; para reflexionar, sin ninguna duda.
Me gustó muchísimo.

Pues vayamos a cumplir la función crítico-animadora (más lo último que lo primero, no vayamos a ahuyentar a los escribidores...) y dejemos mis comentarios a los tres relatos publicados en esta ronda.

RECUPERANDO SUEÑOS.- Estela

Inusualmente largo para el tamaño de los textos que nos suele dejar Estela (lo cual es muy de agradecer) esta mayor longitud no mengua un ápice la calidad del relato. Una bella descripción en la que el mundo de la infancia inicia sus vuelos hacia el mundo de los adultos; y éstos tratan de recuperar el espíritu infantil que los devuelve a ese mundo de ilusión y sueños que nunca queremos perder. El conflicto se plantea con el miedo larvado de la aparición del “lobo” que pueda dañar a la pequeña Josefina. Finalmente la sabiduría de la madre, apoyada tal vez en la probada bondad de los ancianos que protegen a los niños, decide dejarla volar hacia ese mundo que en cualquier caso la espera. Los tonos cálidos de la narración ahuyentan cualquier atisbo de preocupación por el futuro de Josefina. Estela nos deja tranquilos al respecto. Como siempre, Estela, un perfecto regalo para alejarnos de los tedios y las perversidades del mundo.

UNA DUDA, UNA MENTIRA, UN RECUERDO.- J.J.
(Aldeana. Candelabro. Dilema. Forma. Harto/a. Rencor. Trueno)

J.J. nos presenta un relato arriesgado, jugando doblemente con el papel de narrador en primera persona... y femenino. Alguna inconcreción en los personajes de la historia narrada comporta este volapié narrativo. Pero el resultado final es muy satisfactorio, estilística y literariamente hablando. Pues siempre el marco convulso de sus historias hace imaginarse (espero que equivocadamente) un autor, J,J., golpeado y dolorido por los avatares de su vida real. Un acontecimiento, una anécdota dolorosa, trunca un proyecto de vida en común y vacía la del personaje narrador. Escenas de guerra, de acciones bélicas, con la irracionalidad y la vileza que llevan intrínsecas, rompen trayectorias afectas siempre al albur. En la línea de los monólogos interiores que nos ofrece J.J. en muchos de sus relatos, en esta ocasión se ha aproximado a las secuelas psicológicas de este mundo de violencia. Lectura que deja un poso de desasosiego, pretendido quizás por el autor.

LA INÚTIL Y ESTRICTA VIDA DE TEODARDO AGUERREVERRE 
(Circunspección. Esencia. Familiar. Gota. Listo. Hebra. Residuo.)

Un excelente relato psicológico, que pudiera estar firmado por cualquiera de los autores de referencia en estos temas. Un personaje que se forja, para el teatro de su vida, una máscara de impasibilidad, de dureza, que logra ocultar a los demás los sentimientos que, a pesar de todo, mueven sus entrañas. Hasta tal punto que la muerte de esa mujer que le ha entregado su vida hace brotar incontrolada una lágrima de dolor. Muy acertada la nota de justificación que explica a los lectores esa actitud inconmovible de Teodardo, con la coda final en la que justifica su decisión de apartarse del mundo. Relato épico en el sentido de narrar la lucha de alguien que se trató de recrear en héroe desde su papel de hombre corriente. Muy bueno; de lo mejor que recuerdo de J.J.

Bienvenido el cumplimiento de esa promesa hecha. En breve mis comentario s pendientes a los relatos recientes y el que escribiré con estas últimas palabras. De momento la sintetifrase con ellas.

Bienmesabe.Caracolillo.Estilo.Pendiente.Roto.Silencio.Tierno

El recuerdo de un estilo: el de aquella gitanita de negros caracolillos cairelándole la frente, enormes pendientes dorados bailando sobre su cuellecito delgado, mientras yo me comía un tierno bienmesabe, con el silencio de la tarde roto por el llanto de la guitarra.

Mantengo mi palabra y esta es la entrega del final de febrero.

Aldeana. Candelabro. Dilema. Forma. Harto/a. Rencor. Trueno

Una duda, una mentira, un recuerdo

La duda me paraliza y la mentira es una herida abierta que me llena de coraje, es una afrenta, pero también es una burla, la mentira por cualquier esquina que se le mire es un acto desleal. Y ahora estoy enfrentada a la duda y la mentira, muchas veces, con firmeza, juraste que no eras capaz de abandonarme y hoy estoy absolutamente sola, abandonada a mis incontables dilemas, harta de tener que tomar las decisiones que con ilusión decidimos tomar juntos, llena de rencor, no por la circunstancia de estar sola, que tampoco merezco, enfurecida por la mentira, por no cumplir tu palabra, por dejarme sin un mañana posible y sobre todo por haber caído en la ingenua actitud de creerte. Es cierto que necesitaba creer, pero no al punto de enceguecer y no haber sido capaz de valorar aunque fuera un segundo los imprevistos, los errores, esos detalles que nos someten al arbitrio de un destino siempre incierto.

Llegué a esta casa deshabitada y destartalada, atravesé por la carretera de polvo y piedras, que juntos recorrimos tantas veces, y como siempre tropecé con la misma aldeana y su sonrisa de bienvenida, y su mano alada, y su ingenuo saludo grabado en el espejo.

La decisión de comprar la casa, lo recuerdo, la tomamos aquella tarde que un viento bravo nos envolvió en un remolino, y nos abrazamos sin miedo, y encontramos una forma simple de vivir, entregados a construir la alianza de nuestro futuro, con cada uno de los detalles del arreglo de la casa como símbolo, para terminar algún día, juntos, sentados en mecedoras, despidiendo al sol entre montañas.

Tantos planes y hoy deshabitada, tantas opciones y estoy desamparada, tantas posibilidades y no se me ocurre que hacer con este viejo candelabro, paralizada ante la duda. Tanto camino por recorrer juntos y me dejas en esta encrucijada, desolada.

Un relámpago en medio del silencio zigzaguea por un cielo pálido, revienta contra una nube, el trueno es inevitable, igual que aquella mañana.

Intransigente, el recuerdo fiel a mi dolor repite la escena, un muchacho armado enfrente de nosotros, suena una alarma y es el miedo quien dispara el arma y tú por salvarme quien se traga las balas y todas tus promesas quedan envueltas en el humo de la mentira.

Queridos amigos, tenemos las siete palabras para finalizar este mes de marzo cumpluendo con nuestro deber

Bienmesabe.

Caracolillo.

Estilo.

Pendiente.

Roto.

Silencio.

Tierno

RECUPERANDO SUEÑOS.
Le encantaba introducirse en viejos castillos, casas antiguas, lugares tenebrosos y llenos de sombras; claro que ….donde vivía sólo tenía cerca una casa abandonada en las afueras del pueblo.

¿Por qué no visitarla a menudo.? !Estaba de vacaciones...!

A él no le importaba que la casa estuviera destruída casi en su totalidad, podía soñar que aquello era un TEMPLO de los antiguos griegos; o que estaba en la CORTE de algún rey.

Hay que ver que ya tenía 11 años, y podía por sus aprendizajes en la escuela, y lo que había leído, imaginarse perfectamente, y modificar aquello a su antojo. Las vigas de la vieja casa abandonada servían de SOSTÉN a los vuelos de sus sueños.

Mientras ingresaba a la mansión que estaba llena de telarañas, ruidos extraños, fantasmas... se llevaba un par de ALFAJORES, su golosina favorita.

Se había hecho un rincón donde tenía una vieja taza desportillada, un pedazo de espejo, y se había armado una especie de jergón con trapos, donde se acostaba en ocasiones, e incluso se dormía.

Su madre ya sabía donde podía encontrar a Mario, cuando durante horas desaparecía; lo iba a buscar con frecuencia al lugar, para pedirle que volviera a la granja, que tenía tareas para hacer y que por favor, en tanto mirara a su hermanita Josefina de cinco años, durante un rato.

Pero...Mario se aburría... y comenzó a llevar la niña con él; lo hacía después de que su madre se ausentara y ahí sí que no perdía la noción del tiempo, porque la llevaba de vuelta, antes de que regresara; sabía que se enojaría si se enteraba de que la hacía acompañarlo en sus andanzas.

Las LIEBRES pasaban a su lado, cuando iba con Josefina hacia la casa, pero no se asustaban porque era habitual que anduviesen por allí.

Mario y Rodolfo, dos viudos que vivían al salir del pueblo, sin que Mario lo supiera lo vigilaban, de modo tal, que si veían algo extraño, podrían avisar para protegerlo.

Se divertían y añoraban su propia infancia, cuando ellos jugaban a los castillos abandonados, porque suponían acertadamente que esa era la fantasía del niño.
Pero cuando comenzó también a llevar a Josefina... se empezaron a preocupar.
Pero pensaron que allí estaban ellos para seguir controlando, si veían algo extraño o peligroso. De modo que dejaron en paz a los niños.

Así transcurrieron dos años, y los hermanos crecieron. Mario seguía llevando a Josefina con él(ahora con la propia complicidad de la niña) y trayéndola de vuelta a la casa, antes de que retornara su madre.

Los ancianos, finalmente, se pusieron de acuerdo en que sí había que avisarle a la madre que Mario traía a Josefina a la casa abandonada. Por más que nunca había sucedido nada en aquel pueblo, todos se conocían... pero...era más prudente hacerlo.

Así, Alicia se enteró de las andanzas de su hijo y de que hacía tiempo llevaba a su hija a la casa abandonada, y se enojó muchísimo con Mario, al cual castigó por un par de días, privándolo de salidas, tratando de hacerlo comprender, que no era posible que se llevara a la nena con él.Y le dijo que estaba muy disgustada porque la había engañado.
Josefina , en tanto, estaba muy triste; extrañaba a su hermano, y añoraba los juegos en la casa . ! Es que hasta tenía un rincón que se había hecho a su gusto!

Alicia decidió conversar con su hijo:
- ¿Por qué me ocultaste que llevabas a Josefina? !Eso está muy mal! Sabes perfectamente que es un riesgo llevar a la nena contigo!Por qué no me pediste permiso?

- ! Mamá, porque sabía que no me lo ibas a dar! Y la pasamos tan bien con Josefina en la casa! !Se divertía tanto con el rincón que ella misma había armado! ¿ Por qué es un riesgo, mamá? Si acá nos conocemos todos, es un lugar chiquito.

- Aunque nos conozcamos, igual es un riesgo; podría entrar un desconocido, lastimarlos, hacerles daño.

- Pero a mí siempre me dejaste ir solo; ¿ por qué Josefina no puede ir ?

Alicia se planteó que podía responder a eso: ¿porque era una nena y era un lugar que “correspondía que solo pudiesen andar por allí los varones”? Esa era su única preocupación?

Y encontró la solución! Lo que la llevó al PAROXISMO de la felicidad...
Al día siguiente llamó a Mario y le dijo:

- Mario, estuve pensando en lo que me preguntaste ayer, por qué Josefina no?

Y me dí cuenta de una cosa:

- ¿ Por qué yo no?¿ Aceptarías que vaya con Uds. a la casa , que yo sea una princesa y que logres rescatarme de las garras del malvado ogro?

Querido J.J.: Dice un refrán español que el infierno está empedrado con buenas intenciones. Pero Rayuela es nuestro paraíso; así que espero que nos lo empiedres con tus relatos pendientes. .
Mientras tanto, aquí están mis palabras:

BIENMESABE

De bien y me sabe.
1. m. Dulce de claras de huevo y azúcar clarificado, con el cual se forman los merengues.
2. m. Dulce de diversa composición.
3. m. And., Can. y Ven. Dulce que se hace con yemas de huevo, almendra molida, azúcar, etc.

CARACOLILLO

Del dim. de caracol 'molusco'.
1. m. Planta de jardín, originaria de América del Sur, leguminosa, con tallos volubles, hojas romboidales puntiagudas, flores grandes, blancas y azules, aromáticas y enroscadas en forma de espiral.
2. m. Flor del caracolillo.
3. m. Clase de café muy estimado, cuyo grano es más pequeño y redondo que el común.
4. m. Clase de caoba que tiene muchas vetas.
5. m. pl. Guarnición que solía ponerse al canto de los vestidos.

Ánimo, los ausentes, que ya faltan menos.