Una vez aclarado que el relato “Lazaro” de Caizán “me pertenece”, paso a comentarlo, pues no está el patio como para perder tan buenas ocasiones de hablar sobre tan buenos relatos. Desde que leo los relatos de Caizán, ahora aquí y antes en GB, a las variadas visiones imaginarias que tengo de Buenos Aires, a través de las lecturas de Borges, Sábato, Cortázar..., se ha añadido la visión de Buenos Aires a través de Caizán. Puede que sea la menos literaria, pero es la más humana. Él lo sabe y no es aquí el lugar para explicarlo. Tal vez a mis lecturas anteriores, a aquellas visiones, ésas sí, de gran cuajo literario, les faltase esa visión a pie de calle, esos personajes cotidianos y tan humanos que son los que me aporta Caizán. Pero sé que es cuestión de sensibilidades. En este relato, después de la situación ambiental, nos pasa su autor a describir la anécdota, una más de las interpretaciones “heterodoxas”, que no herética, de la vida de Jesús de Nazareth. Y me parece que trasciende al mismísimo Saramago cuando introduce esa faceta de transmigración de los espíritus, intercambiando el de Lázaro por el de Jesús. La justificación a partir del amor a los niños es irrebatible, aceptando que antes de la resurrección de su amigo, Jesús no tuviese especial atractivo para ellos. Pero como bien dice JSM, cerrando el relato: “Hoy que lo recuerdo, la duda por lo realmente ocurrido me carcome la cabeza." Magnífico cuentecito, amigo mío.
Rodrigodeacevedo
22-02-2013 20:07
FICCIONES.- Ana Alonso.
Un bello relato impresionista, que encajaría perfectamente en la prosa poética. Una descripción casi puntillista de sensaciones y paisaje en la que, como fondo de ambientación, el contraste entre el silencio y los ruidos que van conformando la aparición de la vida, un día más, lleva al lector a compartir con la autora esa necesidad de disfrutar el primer mate, mientras escribe en el ordenador: “La noche ya termina. Todo es silencio en este amanecer.” Muy hermoso, Ana.
Rodrigodeacevedo
20-02-2013 14:10
A Estela:
¿Cómo se puede perder una estela? Eso es perderse totalmente. Los relatos, querida compañera, se cuelgan en el hilo "ad hoc", o sea en el "Vamos a contar historias", al que se accede bien desde "inicio", bien desde volver a temas, si estas en "Vamos a contar... Comentarios a relatos". Espero que lo encuentres y nos dejes tus relatos. Siempre nos han gustado mucho.
Estela
20-02-2013 05:33
So-co-rro! me he perdido totalmente.A´cá están los comentarios a "Vamos a contar historias" y donde encuentro las historias? eso me pasa por estar media abandónica de a ratos...Estoy perdida en las "procelosas?" aguas del desconcierto...ja! Me orientan ,por favor?
Gracias.
Hace tanto que los tengo abandonados que no logro recordar mi contraseña para entrar
Eratalia
19-02-2013 21:42
Me permito intervenir para agradecer con el alma ese elogioso comentario de Rodrigo que me ha hecho tan feliz, aunque sé que está dicho desde el cariño, pues no creo merecer tamaña alabanza.
Quiero aclararle que lo de las cápsulas seminales me vino dado por la definición de la palabra en su segunda acepción:
"Relativo a la semilla: aún no se han abierto las cápsulas seminales de los árboles."
Y a la vez intenté jugar un poco con el que podía ser un doble sentido de la frase... Ahí quedó a la interpretación de cada cual.
Muchas gracias también a Ana por su comentario tan positivo hacia mi relatillo.
Con rimas y a lo loco
Rodrigodeacevedo
19-02-2013 19:53
VIENTO DEL SUR.- Gregorio.
Decididamente nuestro compañero Gregorio Tienda Delgado, como ahora se firma, es un verdadero poeta. No porque abunde en la producción de poemas; es que ve la vida y las situaciones con ojos de poeta, de un poeta iluminado por el amor y su inevitable trasfondo de sombra: el drama de la ausencia. Pero él en todo ve la Belleza, la auténtica y esencial belleza que ven los verdaderos poetas. Y con ello trasciende el mero hecho de amar a un absoluto; el concepto que Hegel da de lo verdadero. Es éste el relato de una emoción, así, en abstracto; cada uno podemos dibujarnos o proyectarnos en esta rica pantalla. Como en los buenos boleros siempre nos encontraremos identificados.
Rodrigodeacevedo
19-02-2013 19:35
LAS CÁPSULAS SEMINALES.- Eratalia.
No conozco muchas incursiones de Eratalia en el mundo del relato; más sobre su obra poética, que todos en este foro sabemos ya de su superior calidad. Este relato en nada tiene que envidiar a esa calidad. Una perfecta descripción de ambientes y personajes; una situación psicológica en estos últimos totalmente creíble y, en definitiva, una labor de encaje entre todas las partes, personajes y ambiente, ajustada y armoniosa. La situación descrita, no por tópica deja de ser rica en matices. No se trata sólo de "chica encuentra a chico"; ese magnetismo involuntario que finalmente los atrae nos ilustra sobre una intensidad de miradas que acaba siendo la verdadera protagonista de la situación. Me queda una duda sobre la intencionalidad o significado último de las “pastillas seminales”. Aunque uno, con su habitual malicia, piensa en una metáfora originalísima de un “happy end”. Que así sea.
GRIS.- Ana Alonso.
Un muy bello relato, con una descripción minuciosa y emocionada de un paisaje y un drama. No sé porqué la figura de la mujer desaparecida me ha parecido un trasunto de Alfonsina Storni. Ana ha jugado perfectamente con los tiempos y sus cambios de plano son casi cinematográficos, adecuando a ellos, como con planos medios, los retratos de ambas amigas y sus reacciones derivadas del plano inicial: la mujer misteriosa y desafiante. Un relato que me ha gustado mucho, como me gustan la poesía de Alfonsina y las viejas películas en blanco y negro ambientadas en las costas agrestes.
Ana Alonso
16-02-2013 15:06
Muchas gracias, Eratalia, por tus comentarios a mis historias y a las de los compañeros, que me encanta leerlas también. Dejo mis apreciaciones:
LAS CÁPSULAS SEMINALES de Eratalia
A este cuento le encuentro una similitud con el mío en varios aspectos, pero por suerte es más esperanzador, porque si no los compañeros van a querer matarnos a nosotras con tanto suicidio rondando y deprimiendo. Con una redacción fluida, que se lee de corrido y sin que las palabras se molesten entre ellas, es una historia tierna del encuentro entre dos personas que andaban necesitándose, al menos por ese día y ojala les dure. Los personajes bien caracterizados. Me gustó mucho, sobre todo por el giro final, que te deja respirar y alegrarte por ellos.
EL SILENCIO de Gregorio
Me siento muy identificada con este escrito porque tampoco soporto los ruidos y me cuesta entender que haya gente a la que le ocurra todo lo contrario; que para estudiar, por ejemplo, necesiten escuchar música. O que tengan que encender la radio cuando están solos. En fin, que el escrito parece la introducción a una historia pero se llevó todas las palabras permitidas y la historia quedó para que la imaginemos. Igual me gustó por los motivos que ya expliqué.
CÓMICOS de Juan Fozara
Aunque para crear un clima onírico el lenguaje es demasiado diáfano, en esta historia los personajes desfilan como en los sueños, mezclando actores y tiempos y saltando de una escena otra sin que haga falta una explicación para ese salto. Unos sueñan con empezar su carrera y, sin muchas vueltas, ahí nomás la comienzan, solo oprimiendo un botón, y el otro ya está de vuelta de todo (y con qué trayectoria) puede aconsejarlos. Hay mucha imaginación en juego en todo eso. Me resultó entretenido y agradable de leer por la frescura con que está escrito. En cuanto a la puntuación, creo que cuando se abren signos de pregunta o de admiración no es necesaria la coma (como en la frase “-¡Anda!,es verdad,¿será un vagabundo?”)
ANGELES NEGROS (O MARRÓN OSCURO) de Rodrigo
Con buen humor y con mucha habilidad, Rodrigo convierte un mal rato en un buen cuento. Me hizo reír la situación y la forma de relatar los distintos estados de ánimo desde que el protagonista se prepara para escribir hasta que resuelve hacer de un limón una limonada y aprovecha el tema de la adversidad, la burocracia empresarial y lo genial que es la tecnología mientras nada se complique para resolver su ejercicio semanal. Muy logrado y con oficio.
Eratalia
15-02-2013 23:54
GRIS (Ana)
Esta narración me ha gustado mucho. Para ser un cuento reciclado, has tenido una estupenda mano a la hora de deslizar las palabras exigidas, puesto que no se ve forzado en ningún caso, y si encima la temperatura era algo elevada, pues me veo obligada a felicitarte.
ÁNGELES NEGROS(Rodrigo)
Excelente narración que rezuma sentido del humor y que refleja las peripecias a la orden del día a las que internet nos tiene acostumbrados. Partiendo de un hecho cotidiano resuelves una intrincada operación literaria.
EL SILENCIO(Gregorio)
De nuevo Gregorio nos trae un estupendo escrito en su línea de textos de carácter intimista donde nos comparte sus reflexiones y sus sentires… pero no nos cuenta historias. Al margen de este pequeño detalle, se lee con gusto porque está muy bien redactado.
CÓMICOS(Juan Fozara)
Muy divertida y original su puesta en escena de la obra, reflejando fidedignamente los diálogos de estos entrañables personajes Epi y Blas. Un salto en el tiempo que reúne a personajes tan dispares… Es sorpresivo el imprevisto colofón que da final al relato.
Me ha resultado francamente ocurrente, amena y distraída.
Con rimas y a lo loco
Rodrigodeacevedo
14-02-2013 19:23
EL SILENCIO.- Gregorio.
Bueno; el texto de Gregorio no puede considerarse un relato en sí, sino una exposición personal acerca de su especial sensibilidad contra los ruidos. Aunque muy bien redactado no puedo dejar de advertir esta circunstancia. El uso de las palabras obligatorias, en general, es adecuado, excepto “desopilante”, que se aleja en su contexto a la definición del DRAE. Pero como lo que importa es la intención, más en esta andadura nuestra, tan escasa de “sombras-donde-refugiarse”, bienvenido sea este texto, como lo serían las mismísimas “Confesiones de San Agustín”, si llega el caso. El caso es darle vida al hilo. Pero mi obligación es pedir coherencia con la intencionalidad de “Vamos a ...”
CÓMICOS.- Juan Fozara.
Un simpático texto que recrea personajes entrañables para los que conocimos el Pelargón (¡madre, qué viejos...!) El contraste conseguido por el encuentro casual de Epi y Blas (aquellos disparatados muñecajos de origen foráneo) con el gran Charlot, ya de vuelta y también “forano” como se dice en Aragón, está muy bien logrado, con el añadido del sorpresivo cambio de escenario, dejando a los muñecos súbitamente ante las cámaras a las que siguieron “pegados” tanto tiempo. La intencionalidad (ignoro hasta que punto voluntaria, pero feliz) de ambientar el relato en un vagón de tren, que después se transforma en plató, me ha resultado muy sugerente. El tren de la vida permite estos reencuentros tan gratos.