Que tal Adolfo.

Ya casi soy un converso, que paso de largo y tampoco converso, ni siquiera hago verso como Era, Grego o Rodrigo, ni subo, ni bajo fotos, ni a la Rockola me acerco y no bebo, ni tomo, ni me embriago, pero hoy estoy aquí con cierta pena, por dejarte tanto tiempo solo en la ventura.

Dame esa copa, que yo la pulo, quédate un rato en la butaca, que yo te sirvo, un cóctel de alcoholes varios y aspirinas para las varices, que el domingo es tu día y aquí te encontraré como si nada amarrando los silencios.

Lo mismo no era el objetivo de Don Rodrigo del Amor Hermoso que una servidora se carcajeara profusamente mientras leía tamañas lisonjas, dichas con singular manera e indudable gracejo, pero eso ha sido lo que ha ocurrido.
Y yo tan agradecida, oiga.
Que ni todos los días le dicen a una cosas tan especiales ni me hacen rire aux larmes, que diría algún francés que quisiera decirlo, claro está.

Pasado el primer momento de regocijo, me he dedicado a mirar todos esos ilustres ilustradores que me cita. A la única que conocía era a la Solé y Vendrell, porque en el cole ha habido colecciones de cuentos con sus dibujos y los he reconocido al instante.

De todos modos y como una es muy especial para sus cosas, aunque sean magníficos y yo no les llegue ni a la suela de los zapatos ni a ningún sitio, porque yo ilustro poco y la comparanza no ha lugar (moción desestimada)pues me quedo con algún otro a cuya búsqueda y captura (visual, no sean mal pensados)he ido últimamente y prendado me he.
Y si a partir del martes me conceden el enorme privilegio de poder subir imágenes yo también, ya les mostraré alguna cosilla.
He de confesar que a cada rato vengo de puntillas e intento subir una imagen, ya sea de mi disco o de una URL, y nada. Y eso que me disfrazo previamente para venir y que el programa no me reconozca y me deje subir algo, ¡y nada! Si parezco Mortadelo, o en mi caso, Mortadela, pero nada, ni aunque diga que soy de Bolonia...

Mi señora Doña Eratalia, fruto en sazón de la ubérrima huerta murciana: cómo se me han estremecido los circuitos neuronales afectos al sentimiento que producen los halagos. Imagínese que soy el mismísimo Rey Don Felipe II y su soneto es el túmulo funerario (dios no lo quiera) al que cantó el celebrado Don Miguel de Cervantes, al que estos días honramos -o deberíamos honrar- su memoria y su obra. Pues eso: Don Felipe se estremecería en el tal túmulo al igual que yo me he estremecido frente al ordenata receptor de sus tales lindezas. Pero yo no soy el valentón que en oyendo aquellos halagos “incontinente,/caló el chapeo, requirió la espada/
miró al soslayo, fuese y no hubo nada". Yo me quedo para defender sus versos y amplificarlos donde fuere menester.

Y es que para usted sonetear es tan natural como al viento gregal tallar la dura roca litoral con fantásticas armonías. O algo así, que me conturba el lisonjear. Muchas gracias amiga mía.

No era esa, o no tan lejos iba mi propuesta de juego, ni desde luego obligaba más que lo que nuestra necesidad de participar en Rayuela nos lo impusiese. Osease que considérese cumplida, pero no eximida de su esperada presencia entre esta supervivencia de almas que la admiran. (Jó, estoy de un relamido insoportable; serán los ayunos y abstinencias que me transportan al estado cuasi-místico.)

En cuanto a su apetencia de saber nombres de ilustradores para aportar alguna de sus obras a la Pina..., le daré varios, aunque seguramente su sagacidad buscatoria en el internet ya los ha localizado: Violeta Lópiz y la valenciana Ana Juan; Miguel Calatayud, Carme Solé Vendrell, José Ramón Sánchez... Aunque en mi opinión, usted misma, mismamente, coje los lápices, las acuarelas, o los posos del nescafé y se marca unas ilustraciones de verdadero prodigio. De nada.

A Estela:
Gracias por lo del talento, pero solo es edición digital, corta, recorta y pega. No tiene mérito.
Pero se agradecen las flores.

Pues mantendremos la fe hasta el martes a ver si se obra el milagro que algunos parece ser que no necesitan. Yo, tanto sea copiando desde mi disco duro, como introduciendo una URL, no hay tu tía, ni mi tía, y siempre, indefectiblemente, me encuentro con el enlace subrayado, pero de imágenes, nasti de plasti.

Y sé que no es que lo haga mal (lo hago como siempre y siempre funcionó) pero se debe de haber (o tiene que estar, como el del chiste)vuelto selectivo y mientras unas URL'S le gustan otras no.
Y las mias no le gustan.
Me voy a llorar amargamente.

Desde luego, algo tendrá el agua cuando la bendicen y algo tendrá Rayuela cuando venimos repetitivamente a ver qué se cuece, siempre con la esperanza de que se cueza algo, of course!

Lo que pasa es que yo sigo sin saber cómo arremeter contra la proposición honesta -por supuesto- que nos ha hecho Don Rodri y de todos los presentes (de alma presente)me parece que quedo yo sola, porque las almas ausentes no van a participar. Hasta ahí llego.

Me sabe mal. MMMMmmmm, sí, me sabe mal.
Pero para compensar le dedico un soneto a Don Rodrigo, que sé que son su fuerte.
Y no es cansino (el soneto. Bueno, él tampoco, solo hay que echarle un pulso, a él no, al soneto)
Vamos allá:

Declararle la guerra me he propuesto,
al soneto, aunque suene estrafalario,
y me enfrento feroz al adversario
que en esta lid de versos es mi opuesto.

Es fiero el contrincante literario
y representa un reto manifiesto,
pero al combate, ávida me apresto:
pienso ganar batallas al contrario.

Mi montura espoleo con fe ciega
peleando febril contra el acento,
conquisto sinalefas sin cuartel.

Si veo que mi fuerza se repliega
intentaré tomar de nuevo aliento,
aunque a tiras me deje yo la piel.

¡A la carga, corcel!
Ya puedes prepararte, vil soneto
te voy a sojuzgar, ¡te lo prometo!

.......

Vayamos por partes: querido Gregorio, tus versos siempre emocionan, ya lo he dicho en ocasiones varias: eres un poeta desde la raíz de tu alma. Tienes eso que los que saben llaman estro, o numen, o vaya usté a saber, que te da la divina facultad de saber transmitir toda la poesía que llevas contigo.
Particípala con nosotros siempre que puedas. Y vale, que me acomplejo.

Doña Eratalia, la dulce mi amiga: no creo que mi flauta sea mejor o peor que otras. Es cuestión de fe, como cuestión de fe ha sido el que la respondan del Topforo. Lástima que esa fe que hace sonar mi flauta no sea válida en otros menesteres, como el saber hacer un buen soneto. Pero es que, entre nosotros, me resulta mu cansino.

Y al resto de compañeros de aventura, la actividad de estos días en nuestra querida Rayuela creo que también se debe a la fe; y al empeño que estamos poniendo por mantener vivo este árbol a cuya acogedora sombra nos acogemos.

Felices vacaciones de Semana Santa a quienes las disfrutéis y adelante con nuestro ilusionante camino.

Hola, amigas, Era y Estela. Gracias por vuestra felicitación. La verdad que no ha sido sencillo subir este fofo-poema. Seguramente habrá caminos más cortos para quien domine la informática, pero como todos los caminos conducen a Roma, os explico el que he seguido:
Guardé el fofo en un archivo JPG, en mi ordenador. Luego mediante el editor PhotoScape, incorporé el texto, (soneto) ese conjunto lo archivé en mi archivo de foto-poemas en mi ordenador, luego lo archivé en Photobucket Backup, de ahí copié la dirección de imagen, y la pegué aquí.

¿Porqué hice tantos pasos? Pues... porque en los pasos anteriores, no aparece la dirección de imagen.

Un abrazo fuerte. Uno para cada una.

Precioso tu poema, Gregorio! Me ha encantado!
Felicitaciones!

ja! Como hicieron para hacer aparecer una fotografía de mujer en medio de los muchachos? Yo llego a intentar eso, y no queda ni la mujer ni los muchachos...jaja!
Que talento! Felicitaciones, amigos!

Te felicito por tu homenaje a las musas, estimado Gregorio y porque has podido subir una imagen!!!
¡Es fantástico!
Un abrazote para ti.

Pues ya me dirás cómo lo has hecho, que yo de ninguna de las maneras.