En el fondo, si me paraba a pensarlo, de pronto a mí tampoco me parecía tan importante. Me sentía atraída por una persona, ¿qué problema suponía eso? Ninguno. ¿Por qué le daba tantas vueltas? Bueno, porque me descolocaba, porque nunca antes me había sentido desarmada por nadie… pero quizá era cierto que le estaba dando demasiada importancia a algo que no la tenía. Estuve a un pelo de empezar a rebatir y pedirle más explicaciones, pero me di cuenta de que no tenía sentido, en el fondo era cierto, tanto esperar a Freud para que con una frase me hiciera ver la realidad más cristalina.